Por Este 19 de marzo a las 21:04 horas del Centro de México, el Sol se alineará directamente sobre el Ecuador, marcando un equilibrio perfecto entre el día y la noche, marcando el inicio del equinoccio de primavera.
Este fenómeno astronómico ocurre dos veces al año, creando un equilibrio entre el día y la noche, con una duración igual de luz y oscuridad, señalan expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)
A pesar de que la Tierra se encuentra en una posición más alejada del Sol durante la primavera, su inclinación permite que México y otras regiones reciban una mayor cantidad de luz solar. Este hecho contrasta con el invierno, donde la inclinación de la Tierra reduce la cantidad de luz.
Desde el equinoccio de primavera, la duración de la noche comienza a acortarse gradualmente, dando paso a días más largos y luminosos. Este proceso se invertirá con la llegada del equinoccio de otoño, cuando las noches se prolonguen hasta alcanzar su máximo durante el solsticio de invierno.
La máxima casa de estudios señala que los equinoccios son el resultado de la inclinación de los ejes de rotación de los planetas mientras orbitan alrededor del Sol. En el caso de la Tierra, con su eje inclinado aproximadamente 23 grados, esta inclinación es responsable de las variaciones estacionales, determinando qué hemisferio recibe más luz solar en función de la época del año.
