Por PGJEH: Profesionalización contra el secuestro
Con el objetivo de combatir y erradicar el que podría considerarse como el tercer delito más atroz, (después de la trata y la violación) el secuestro, a finales del año 2009, fue publicado un Decreto Presidencial con el cual se crearon 32 Unidades Especializadas en Combate al Secuestro (UECS).
Estas unidades, desde su creación, contemplaron la actuación ministerial y policial bajo protocolos que permitieran homologar la actuación del personal para alcanzar una alta efectividad en la investigación y persecución de los delitos en materia de secuestro.
Así lo establece el decreto presidencial.
La UECS en Hidalgo se ha mantenido, por al menos 13 años, entre las primeras cinco con mayor rango de efectividad en el país.
La efectividad comprende la investigación y resolución de secuestros, por supuesto, con el rescate de las víctimas con vida.
En segundo término, la recuperación del rescátate -monetario- que en determinados casos se hubiese producido.
Durante esos 13, quizá 15 años, la UECS ha tenido dos directores generales, Luz María Hernández y, desde hace 12 años, Manuel García.
El nivel de profesionalización de ambos directores es notable, el de los integrantes, en consecuencia, lo es también.
El tres de noviembre de 2013, la Secretaría Técnica del Consejo para la Implementación del Sistema de Justicia Penal (SETEC) del gobierno federal, con el apoyo de la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID) elaboraron, con un universo de 16 mil encuestados, la Encuesta Nacional del Sistema de Justicia en México (ENSIJUP).
En la ENSIJUP, se registró a la Procuraduría hidalguense como la más confiable del país.
Uno de los principales indicadores que contempló la encuesta fue la efectividad en el combate a delitos de alto impacto, entre ellos, desde luego, el secuestro.
Casi tres lustros la UECS ha sido un ala de altísima calidad en la PGJEH, no es la excepción en la actual gestión, la de Francisco Fernández Hasbun.
El jefe del despacho aseguró que “ningún delito es percepción”, ya que todos se deben investigar con la misma importancia y dedicación.
Además del denuedo profesional, en ese encargo se requiere alta sensibilidad, para no hacer y también para no decir barbaridades que lastimen a la sociedad más allá de lo que lo hace el delito del que es víctima.
Nadie va a esta procuraduría, ni a ninguna otra, por gusto o por el placer de conocer sus instalaciones.
La población merece el respeto de un funcionario que no se burle, así sea inconscientemente, de la tragedia con la intención de minimizarla.
Es el primer paso para garantizar el acceso a la justicia.
**Las expresiones contenidas en estas líneas, son opinión de ellas, y por lo tanto, no representan la postura editorial de CentralMX.
Síguelo por X:
