Por Christian Guadarrama Martínez
Elon Musk se enfrenta a un creciente boicot corporativo después de que retuiteó una publicación antisemita el miércoles. La publicación, que fue compartida por un usuario de X/Twitter, afirmaba que las comunidades judías estaban impulsando un “odio dialéctico” contra los blancos. Musk respondió a la publicación con un simple “Has dicho la verdad”.
La publicación de Musk provocó una condena inmediata de la Liga Antidifamación (ADL), que calificó el tuit de “peligroso” y “antisemita”. Otros líderes judíos también condenaron el tuit, y un grupo de más de 150 líderes judíos pidió a las grandes empresas de medios de comunicación y digitales que “detuvieran” la financiación de X/Twitter.
En respuesta, una docena de grandes empresas de medios de comunicación, incluidas Comcast/NBCUniversal, Paramount Global, Warner Bros Discovery, The Walt Disney Company, Apple y Lionsgate, anunciaron que suspenderían sus anuncios en X/Twitter.
El boicot corporativo es un golpe significativo para X/Twitter, que depende de la publicidad para generar ingresos. La plataforma ha estado luchando para combatir el discurso de odio en su plataforma, y la publicación de Musk ha intensificado las críticas a su manejo del problema.
En un intento de controlar los daños, la CEO de X/Twitter, Linda Yaccarino, publicó un tuit en el que dijo que la plataforma tiene “tolerancia cero para el discurso de odio y la discriminación”. Sin embargo, el boicot corporativo continúa, y es probable que el daño a la reputación de X/Twitter sea duradero.
Impacto del boicot
El boicot corporativo tendrá un impacto significativo en los ingresos de X/Twitter. Según un informe de eMarketer, las empresas de medios de comunicación gastaron alrededor de 1.600 millones de dólares en publicidad en X/Twitter en 2022. Si el boicot se prolonga, X/Twitter podría perder una parte significativa de esos ingresos.
El boicot también podría afectar a la reputación de X/Twitter. La plataforma ya ha sido criticada por su manejo del discurso de odio, y el boicot podría consolidar la percepción de que X/Twitter es un lugar donde el discurso de odio es tolerado.
Posibles consecuencias
El boicot corporativo podría tener una serie de consecuencias para X/Twitter. En el corto plazo, podría provocar una reducción de los ingresos y una pérdida de reputación. En el largo plazo, podría llevar a una disminución en el número de usuarios de la plataforma.
Si el boicot continúa, X/Twitter podría verse obligado a tomar medidas más drásticas para combatir el discurso de odio en su plataforma. La plataforma podría implementar nuevas políticas de moderación o podría contratar más moderadores.
Sin embargo, incluso si X/Twitter toma medidas para abordar el discurso de odio, es probable que el boicot continúe. El boicot es una reacción a la publicación de Musk, que fue ampliamente condenada como antisemita. Es probable que los líderes judíos y otros grupos continúen presionando a las empresas para que boicoteen X/Twitter hasta que Musk se disculpe por su tuit.