Suponiendo… sin conceder

Suponiendo… sin conceder

Julio Menchaca: Reforma Judicial explicada

Desprovisto del lenguaje farragoso y demagógico con que se ha promovido y defendido, por gran parte del cuatroteísmo, el gobernador de Hidalgo explicó la necesidad de llevar a cabo esta iniciativa presidencial.

Más allá de que ningún actor político afín a la grey presidencial reconocerá que esta enmienda es un berrinche del primer mandatario, el gobernador de Hidalgo aterrizó la reforma al punto central: la diferencia desproporcional entre el ingreso que tienen los trabajadores del Poder Judicial Federal en comparación con los juzgadores locales.

Sin embargo, aclaró que para participar (una de las aportaciones que envió), antes de pensar o competir en una elección popular, se tiene que generar un comité que evalúe, que quienes pretenden ocupar una plaza cumplan con determinados requisitos.

Los requisitos indispensables para impartir justicia, nada más, pero nada menos.

Pareciera que entre quienes promueven la reforma presidencial olvidaron ese pequeño detalle pues, atrapados en la vorágine electoral, piensan que van a elegir cargos de esos que la Constitución señala como requisito solamente saber leer y escribir.

Y como la cuatroté hizo ministra de la Suprema CorteLenia Batres Guadarrama, quien a la luz de los hechos ha demostrado no tener capacidad ni idea de cómo ejercer ese toral cargo.

Para Menchaca Salazar no hay nada como “un examen público-oral, teórico-práctico”. Por lo que, primero, se deben regular los requisitos que marca la Constitución.

Ante la barrabasada y barbaridad que implicará elegir por votación a miles de personas expertas en Derecho, que ahora además deberán ser agradables y salir a campaña, es tranquilizante saber que hay quienes caminan en la sensatez que da el conocimiento de las funciones judiciales.

La ministra plagiaria, Yasmín Esquivel, mantuvo una muy activa campaña mediática para acometer en contra de la ministra presidenta, Norma Piña, a quien exige su renuncia

De esas campañas mediáticas que solamente pueden armarse en alguna poderosa oficina de comunicación social.

Será el caso que quienes pergeñan la monstruosa operación para aterrizar la reforma presidencial se dieron cuenta del sinsentido monumental y buscan operar lo que en realidad es la esencia, el quid, la litis, la génesis del berrinche presidencial: la defenestración de la ministra presidenta de la Suprema Corte, de origen hidalguense, por no haberse sometido a la voluntad del pueblo encarnado en un proyecto político

O se quieren ahorrar los fideicomisos judiciales que al parecer alcanzarán para sostener a todo el país.


**Las expresiones contenidas en estas líneas, son opinión de ellas, y por lo tanto, no representan la postura editorial de CentralMX.

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