Por IEEH, pérdida de confianza
El uno de febrero de 2020, el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) removió del cargo de Consejera Presidenta y de Consejero del Instituto Electoral del estado de Hidalgo a Guillermina Vázquez Benítez y a Francisco Martínez Ballesteros, respectivamente, por vulnerar los principios de certeza y máxima publicidad durante las elecciones celebradas en octubre de 2020 en la etapa de resultados electorales.
La sanción se da debido a que durante el proceso electoral de 2020 existieron fallas en el Programa de Resultados Electorales (PREP) que no se corrigieron a tiempo y, en consecuencia, se utilizó una herramienta informática distinta que no fue avalada por el INE como mecanismo para dar a conocer los resultados preliminares.
Casi cuatro años después, el órgano electoral local continúa dando tumbos en el aspecto más importante y de indispensable presencia en el proceso electoral: la confianza.
Con un retraso de poco más de 24 horas, el Instituto Estatal Electoral avaló las postulaciones, con reservas, del PAN, PRI, PRD y la coalición “Juntos Seguiremos Haciendo Historia en Hidalgo”, integrada por Morena-Panalh.
Durante el trayecto, el consejo del IEEH evidenció falta de pericia y de planeación para analizar y aprobar siete mil registros de candidaturas, cuando nunca antes había ocurrido.
El calendario electoral establecía que las campañas iniciarían el primer minuto de la madrugada del 20 de abril, el sábado, sin embargo no pudieron completar el proceso para cumplir con lo que el propio consejo determinó.
La presidenta del IEEH, Magdalena González Escalona dijo que la causa del atraso fue la “enorme carga de trabajo” para revisar la documentación de cada uno de los integrantes de las planillas, candidatos a alcaldes, síndicos y regidores, además de verificar que los partidos políticos cumplan con las acciones afirmativas de equidad de género y comunidades indígenas.
En esas acciones, además del atraso, el IEEH incurrió, de acuerdo con representantes de los partidos políticos, en sesgo y discriminación.
Los antecedentes no son nada halagüeños y el actuar presente no abona en nada a la confianza que los contendientes y sobre todo la ciudadanía deben depositar en el instituto.
En el momento de la remoción de Guillermina Vázquez Benítez, el Consejero Electoral del INE, Martín Faz Mora, hizo un llamado al Tribunal Electoral y al Poder Legislativo para que se reflexione sobre la viabilidad de que el Consejo General del INE pueda imponer un rango de sanciones que vaya acorde a la gravedad de los incumplimientos y las violaciones a las reglas electorales perpetradas por parte de consejeros y consejeras de los Órganos Públicos Locales Electorales, ya que la única sanción posible es la remoción.
No se avanzó en esa posibilidad debido a la premura de dar inicio al proceso que llevó a la renovación de la gubernatura en Hidalgo.
Pero el planteamiento está vigente.
Y los motivos, también.
