Suponiendo… sin conceder

Suponiendo… sin conceder

PAN, de José Antonio Tellería a  Asael Hernández

 La decadencia del Partido Acción Nacional en Hidalgo, cuyo momento cumbre fue hoy, hace 25 años, cuando José Antonio Tellería Beltrán venció al PRI y gobernó por primera vez la capital del estado, es, más que en términos políticos, en los valores que presume la rancia ideología panista.

Hoy, el PAN tiene una representación en el Congreso del estado y gobierna cuatro de 84 municipios.

José Antonio Tellería Beltrán asumió la alcaldía pachuqueña el 16 de enero del año 2000, luego de pedir licencia como diputado local; sacó al PRI de la Casa Rule por primera vez en la historia de la capital estatal en un, entonces, inexpugnable bastión tricolor, que era el estado de Hidalgo.

En su atropellada administración municipal, golpeada por el oficialismo de entonces, Tellería Beltrán se convirtió en un líder moral del panismo estatal, de familia empresarial, ingeniero Mecánico Administrador por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey.

Prototipo del panismo tradicional, empresario, conservador, Tellería Beltrán encabezaba un panismo que confrontó al PRI-Gobierno que dominaba en ese momento la escena estatal.

El retroceso del panismo en un cuarto de siglo se refleja en el liderazgo actual del partido de derecha, cuya principal figura debió acudir a una argucia legaloide para asaltar un espacio político que no le correspondía.

El diputado “indígena”, Asael Hernández Cerón, quien hoy encabeza “moralmente” ese mismo partido.

Poco queda de aquel primer gobierno de oposición en la capital de Hidalgo.

El legado es la primer policía municipal de Pachuca, cuyo primer secretario debió huir por tener una orden de aprehensión incumplida y el segundo, Francisco Armenta Serrano, consolidó un cuerpo policial que, con carencias, se encargó de la vigilancia de la ciudad desde entonces.

Armando Madariaga, Georgina Obregón, profesionales en su ramo que cumplieron con creces.

Un cuarto de siglo bastó para que el liderazgo moral del panismo sea hoy uno, a todas luces, inmoral. 

José Antonio Tellería Beltrán murió el 8 de julio de 2008, víctima de cáncer, enfermedad que lo atacó  desde el año 2002, cuando aún se encontraba en funciones como alcalde.

Tenía 44 años de edad.

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