Por La ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Ana Margarita Ríos Farjat, aseveró que la vocación de servicio de las personas juzgadoras debe ser encomiable, ejemplar y meritoria, por lo que no debe permitirse que bajo este manto superior se esconda la corrupción.
Asimismo, hizo hincapié en la incongruencia de adoptar posturas aparentemente progresistas como pretexto para la impunidad, señalando que la justicia no debe subordinarse a intereses personales o políticos.
“No, no se trata de impunidad disfrazada de progresismo, ni de que las generaciones del porvenir sufran porque una sentencia encontró mejor fundamento en billetes y monedas que en los límites de las leyes de desarrollo urbano, civiles, ambientales, autorales, laborales… Justicia a modo”, sentenció la ministra.
Ríos Farjat aseguró que el mundo judicial no está exento de que entre sus filas haya malos elementos. Sin embargo, enfatizó que no es posible tolerarles.
En cuanto al reclutamiento y formación de nuevos jueces y juezas, la ministra insistió en mantener altos estándares de selección y capacitación, garantizando así la excelencia en el servicio judicial, pues, según sus palabras, “México no merece menos”.
