La brecha siguió en la “legislatura de la inclusión”: Citlali Jaramillo 

La brecha siguió en la “legislatura de la inclusión”: Citlali Jaramillo 

La diputada local independiente, de la LXVI Legislatura, Citlali Jaramillo Ramírez, aseguró que la autollamada“legislatura de la inclusión” dejó algunos pendientes en el tema de la verdadera inclusión para las mujeres.

Detalló que se definió como la legislatura de la inclusión porque por primera vez se atendió el hecho de que sean el mismo número de diputadas que de diputados, sin embargo, reconoció que las mujeres no ocuparon ningún puesto de decisión importante ni en las comisiones ni mucho menos en la Junta de Gobierno.

“Que más hubiéramos querido, hicimos el esfuerzo, levantamos la mano, lo dije fuerte y quedito que no estaba contenta con la designación que habían hecho porque cuando entramos por el PRI, el mismo era presidente del partido, el mismo era presidente de la Junta (de gobierno) y entonces de qué sirvió ir a tierra y ganar una elección tan complicada si no hubo ningún reconocimiento”. 

Explicó que se legisló en muchos aspectos pero “la brecha sigue siendo grande”, las mujeres “debemos de seguir empujando hasta que dejemos de ser parte de una cuota, hasta que dejemos de ser parte de una ley”. 

Incluso, añadió, en esta legislatura de la inclusión un hombre encabezó la comisión de género, “algo que reclamamos en distintos momentos sin que hubiese respuesta, se logrará hasta la próxima legislatura, porque esos espacios deben ser de las mujeres, los derechos de las mujeres y los de la comunidad LGBTTIQ son igual de importantes pero distintos”. 

Respecto de su relación con el exgobernador Omar Fayad Meneses, Jaramillo Ramírez aseguró que el hoy embajador en Noruega se rodeó de “corifeos tóxicos”, que se encargaron de “envenenarle la mente y el alma”.

“Lo que más me dolió y sucedió en los últimos años, era la clásica patada por debajo de la mesa, de esas que amarran navajas”, señaló en entrevista con CentralMX.

“Me decían: no quieres hacer lo que yo te digo, entonces le voy a decir al jefe que hablas mal de él”.

La todavía diputada local agregó que siempre que alguien no lograba ponerse de acuerdo, iban y le decían, al ahora embajador, “está hablando mal de ti”. “Yo no tengo por qué hablar mal de Omar Fayad como lo pusieron en un “trascendido”, no es el primero, han puesto muchos”.

Ante estos señalamientos que nunca hizo en contra de Fayad Meneses, Jaramillo Ramírez lo reconoció como el líder que es, por lo que externó su respeto y gratitud, ya que fue él quién la invitó a mi primer cargo público.

“Me ayudó a crecer, a evolucionar, a centrarme en lo que quiero y no quiero, a tener ese ADN de decir: esta es la ruta que me gusta, una mujer de causas”, agradeció al exmandatario estatal.

Recordó que en esos conflictos de bancada, es común atacar a las mujeres, debido a que no conocen el trabajo de territorio y por su falta de oficio político, por lo que se les hace fácil denostar, “grillando por falta de capacidad”.

Jaramillo Ramírez comentó que, “sin pecar de vanagloria”, cree que será de las últimas diputadas que ganaron por el PRI, “yo dudo mucho que hoy haya un candidato que vaya a ganar por el partido en el mediano plazo”. 

“Sin querer, puede que sea la única que lo logró, así como lo logré”. 

Al respecto, explicó que algunos políticos estaban en un cargo, al mismo tiempo que ya estaban viendo la siguiente elección; por lo cual obtuvieron escasos resultados, viendo otros escenarios, “no pudieron con este, menos podrán con lo que sigue”.

Aseveró que, actualmente los partidos ya no respetan su ideología, la congruencia, ya no forman nuevos cuadros y siguen peleando por los privilegios que han tenido por décadas.

Citlali Jaramillo enfatizó que no se irá a otro partido político, “renuncié y, puede ser, que regrese cuando haya otra dirigencia que verdaderamente dé apertura y recupere los ideales que tenía el partido, mientras estén me voy, tanto de la nacional, la estatal y municipal”.

La legisladora confirmó que vivió una campaña con violencia política, debido a que su compañero (para la diputación federal) solicitaba en los eventos “que no votaran por ella”, únicamente por él.

“Lo decía fuerte en escenarios, en reuniones, lo decía en serio”. 

“Manifesté mi inconformidad (ante más dirigencias del PRI), me daban su apoyo, pero el abrazo era allá y el golpe acá, a la que no querían era a mí”.

Recordó que cuando ella hacía eventos de campaña para dar a conocer su plataforma política invitaba a las estructuras, mismas a las que regañaban, por lo que se dividieron, “lo manifesté en la dirigencia nacional, me dijeron que me iban a apoyar y no hubo tal respaldo”.

Dijo que por dicha situación estaba totalmente enconada con el presidente del comité municipal de Pachuca (Benjamín Rico Moreno) por la forma en que trataba y se dirigía a las estructuras, con una total falta de respeto y, también, a mi persona.

En la mesa te decían que todo está bien, acto seguido, salía en “los trascendidos”.

Citlali Jaramillo indicó que la falta de liderazgo de algunos personajes que quisieron imponer, no permitió que se llegara a acuerdos y entender las diferencias de cada uno de ellos.

“Lo más triste es que en la mesa te decían: todo está bien, no te preocupes, está bien que pienses diferente; acto seguido, un golpe en los medios, un trascendido”, incongruencias que provocaron que se abriera una brecha y que detonaron en desencuentros. “Te sentabas y te querían manipular”, por lo que decidió por la diputación independiente.

Finalmente, Jaramillo Ramírez enfatizó que no estará en ningún otro partido político ni tampoco buscará espacios en el gobierno estatal.

“Me estorba, para mis proyectos sociales y personales con las mujeres en Impulso Rosa”.

“No necesito estar en una nómina para hacer política”, concluyó.

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