⁃ El Popocatépetl es uno de los volcanes más estudiados y monitoreados a nivel mundial, de acuerdo al CENAPRED.
El semáforo de alerta volcánica es un sistema diseñado para monitorear y comunicar el nivel de actividad de un volcán. El objetivo de esta alerta es mantener informada a la población y a las autoridades sobre la situación actual y tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad de las personas que viven en áreas cercanas.
Este sistema a cargo del Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED), se basa en la observación y monitoreo constante de diferentes parámetros volcánicos, como las emisiones de gases, la actividad sísmica, los cambios en la forma del volcán y otros indicadores.
El sistema de alerta consta de tres niveles, que van del verde al rojo, cada uno con sus propias medidas de protección civil:
Verde: Normalidad. Se recomienda informarse sobre rutas de evacuación y refugios temporales.
Verde Fase 1: Volcán en calma. Indica actividad baja y no representa un peligro inminente.
Verde Fase 2: Mínimas manifestaciones, fumarolas y actividad sísmica esporádica. Sin embargo, se mantiene la vigilancia constante y se recomienda estar preparado ante posibles cambios.
Amarillo: Alerta. Hay que permanecer atento y preparado ante una posible evacuación.
Amarillo Fase 1: Manifestación de actividad. Indica un aumento en la actividad volcánica. Se pueden presentar exhalaciones de vapor, gas y ceniza, así como sismos de baja magnitud. Se establecen restricciones en el acceso a ciertas áreas cercanas al volcán.
Amarillo Fase 2: Incremento de actividad. Posibilidad de caída de ceniza y fragmentos incandescentes en áreas cercanas. Se establecen medidas adicionales de seguridad y se amplía la zona de restricción.
Amarillo Fase 3: Actividad intermedia a alta. Persistencia de fumarolas, gas y caída leve de cenizas, explosiones de intensidad creciente con lanzamiento de fragmentos incandescentes. Se comienzan a preparar albergues ante posibles evacuaciones.
Rojo: Alarma. Significa peligro, se debe estar listo para la evacuación.
Rojo Fase 1: Actividad explosiva de peligro intermedio a alto. Columnas eruptivas de varios kilómetros, flujos piroclásticos y lodos en poblaciones cercanas. Evacuación inminente.
Rojo Fase 2: Actividad explosiva de peligro alto a extremo. Columnas eruptivas de gran alcance, grandes lahares de efectos devastadores, daños graves al entorno.
Es importante que las personas que viven en áreas cercanas al volcán estén atentas a las indicaciones de las autoridades y sigan los protocolos de seguridad establecidos en caso de una erupción o un aumento significativo en la actividad volcánica. El monitoreo constante y la comunicación efectiva son fundamentales para garantizar la seguridad de las comunidades afectadas por la actividad volcánica.