Por De cara al proceso electoral de 2024 en Hidalgo, donde se renovarán 30 diputaciones locales, 84 presidencias municipales y otros cargos, representantes religiosos participaron en foros de capacitación de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGEJH). Claudia Vieyra Alamilla, de la Dirección General de Asuntos Religiosos (DGAR), destacó que el curso abordó conductas infractoras y la violencia política contra las mujeres, en busca de fomentar una nueva cultura de denuncia.
Vieyra Alamilla señaló: “el interés es que todos los representantes de estas expresiones tengan conocimiento acerca de lo que sí se puede hacer, desde su posición como ministros de culto, dentro de lo que sean las campañas electorales”.
A las actividades asistieron 83 asociaciones de culto y 67 comisiones de municipios como Pachuca, Cardonal, Tula de Allende, Acayuca, Atotonilco el Grande, Francisco I. Madero, Tlanchinol, San Salvador, Progreso de Obregón, Ajacuba, Mineral de la Reforma, Tezontepec de Aldama, Epazoyucan, Mixquiahuala y Actopan, participando tanto presencial como virtualmente.
La directora de la DGAR enfatizó que los derechos político-electorales de las comunidades de culto se rigen por la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público, comprometiendo al gobierno a respetar las garantías en materia de libertades religiosas. Según el Inegi, Hidalgo cuenta con 241 asociaciones religiosas, 551 ministros de culto y 1,687 establecimientos de culto registrados ante la Segob.
Con base en la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público, se prohíbe a ministros de culto utilizar lugares de culto, locales públicos o medios de comunicación para influir en el voto, según los artículos 14 y 21 de la legislación. La DGAR subrayó que los ministros de culto no pueden asociarse con fines políticos ni realizar proselitismo, además de ser ilegal celebrar reuniones políticas en templos.
