Revocación del mandato, gasto superfluo
Figura demagógica que representa una erogación extraordinaria de dinero, como si en México o en Hidalgo estuviésemos para erogaciones extraordinarias, ni siquiera tiene aún un monto preciso.
Alejandro Velázquez Mendoza, titular de la Secretaría del Despacho del Gobernador, explicó que aún no hay un monto económico preciso para ese ejercicio.
El funcionario estatal aseguró que este proceso se realizará una vez que concluya la ceremonia del tercer informe de gobierno del gobernador; “se inicia el plazo para reunir las firmas y entregarlo al Instituto Estatal Electoral de Hidalgo”.
Se debe reunir el 10 por ciento de las firmas que conforman el padrón electoral en el estado.
El 15 de enero pasado, el gobernador Julio Menchaca consideró que la revocación es un instrumento de participación ciudadana para determinar la conclusión anticipada del desempeño de un gobernante.
En abril de 2022, el ejercicio para decidir si el expresidente Andrés Manuel López Obrador continuaba o no como presidente confirmó la alta aprobación que tenía en ese momento: 92 por ciento votó por su permanencia.
Si, pero el 92 por ciento del 18 por ciento del electorado, muy, muy lejos del 40 por ciento necesario para hacerlo vinculante.
Para ese ejercicio, el INE anunció un presupuesto de mil 692 millones 500 mil pesos, para 16 millones 502 mil 636 votos, el costo de cada voto fue de 102.50 pesos.
Una fortuna tirada a la basura.
En recientes encuestas publicadas en algunos medios de comunicación, el gobernador Julio Menchaca se encuentra entre los cinco mandatarios estatales mejor posicionados, con una aprobación que oscila entre el 65 y 70 por ciento.
¿Pero qué necesidad, para qué tanto problema?
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