Por PGJEH y Contraloría: fuego en el Congreso estatal.
Con la sutileza de un bisturí quirúrgico, el Congreso del estado programó la comparecencia de las dos dependencias con temas más álgidos para el mismo día.
El contralor Álvaro Bardales Ramírez y el jefe del despacho de la Procuraduría General de Justicia, Francisco Fernández Hasbun comparecen ante el Poder Legislativo este lunes.
Ambos relacionados directamente con la investigación de la llamada Estafa Siniestra, caso en cuyo trayecto se han dado resultados, sin duda, quizá no con la velocidad que el pueblo y las redacciones quisieran ver, pero los hay.
Hay responsables presos y sentenciados, algunos aún sin sentenciar pero con procesos en marcha y, sobre todo, recursos recuperados por poco más de 200 millones de pesos.
En ambos casos, Bardales Ramírez y Fernández Hasbun, sin escándalos mediáticos, han avanzado con la velocidad que se los permite el paquidérmico y reumático sistema judicial mexicano, que ahora, peor que nunca, es un lastre para cualquier investigación criminal.
Como lo hemos mencionado en este pertinaz espacio: la lógica apunta a que personajes que no han sido alcanzados por las investigaciones debieran haber sido ya, cuando menos, objeto de un interrogatorio.
Pero la lógica y la justicia no son entes que pertenezcan a la misma clase social.
Para saber siquiera si les pasó de noche por cómplices o por p…estantes.
Este día sabremos más sobre esas investigaciones y más sobre lo que se viene, sin duda.
A pesar del paquidérmico y reumático sistema judicial mexicano.
A pesar de la frase aquella de noviembre de 2023 del expresidente Andrés Manuel López Obrador: “Tenía un compromiso con Omar Fayad después de la explosión en Tlahuelilpan”.
