Por La UAEH, insensible. La CDHEH, incompetente
El edificio central de la Universidad Autónoma del estado de Hidalgo es imponente, tanto como su centenaria historia.
Sí, el inmueble es histórico, vetusto, fundado por la venerable Orden de Los Juaninos y un largo etcétera.
Un joven inconsciente, sangrante, que en vilo era cargado entre cuatro hombres, corrieron por la calle de Aquiles Serdán, luego Abasolo, hasta entregarlo a paramédicos de una ambulancia.
Una mujer, madre de familia, por la misma calle buscaba atención médica por la abertura en su cabeza de la cual emanaba sangre profusamente.
La insensibilidad mostrada por el rector de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, Octavio Castillo Acosta, a lo largo de todo el larguísimo conflicto con estudiantes del Instituto de Artes, tuvo su colofón el día 20 de septiembre de 2023, un día después de que trabajadores de “Seguridad Universitaria”, comandados por integrantes del Consejo Estudiantil, golpearan alumnos y padres de familia sin consideración alguna.
Ayer, la Defensora Universitaria, la periodista Elsa Ángeles Vera y el director jurídico de la institución, Rafael Hernández, extendieron esa insensibilidad al terreno jurídico y no aceptaron emitir la disculpa pública que la CDHEH planteó en una recomendación, la R-VG-00012-24, luego del ataque a golpes y palos del año pasado.
La Comisión de Derechos Humanos del estado tardó once meses en integrar una queja de oficio que inició ese mismo 20 de septiembre de 2023.
La Ley de Derechos Humanos del estado estipula que la integración de una queja tiene un plazo de seis meses, el organismo público autónomo tardó el doble.
La ombudsperson estatal, Ana Karen Parra Bonilla, incurrió en bisoño error al difundir la resolución del Consejo Consultivo de la CDHEH antes del plazo que la autoridad señalada tiene para dar respuesta y aceptar -y cumplir- o rechazar e informar el motivo.
Añora, la titular de la CDHEH se hizo acreedora a tres denuncias, por los delitos de revelación del secreto agravado, abuso de autoridad e infidelidad en la custodia de documentos y violación de secreto.
Además, ahora la UAEH exige una disculpa pública de la ombudsperson a la universidad.
Y para cerrar, como medida cautelar, la UAEH solicita en las denuncias la suspensión del cargo de la presidenta de la CDHEH, Ana Karen Parra Bonilla; la visitadora general, Briseida Martínez Rosales, y Óscar Chargoy Rodriguez, director de análisis y contexto.
Y de las disculpas públicas a las y los estudiantes golpeados, nada.
Durante la rueda de prensa ofrecida por las autoridades de la UAEH, se proyectaron los mensajes de respeto a la autonomía universitaria de Claudia Sheinbaum y Julio Menchaca.
La cantaleta de la autonomía, utilizada como ariete para defender excesos, no de la UAEH, por supuesto, como se dijo.
No es la UAEH, no es la autonomía.
Es el grupo político que la usufructúa políticamente, desde hace más de 40 años.
**Las expresiones contenidas en estas líneas, son opinión de ellas, y por lo tanto, no representan la postura editorial de CentralMX.
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