Reforma judicial, berrinche mal informado
El pasado 20 de junio, el aún senador de la República, Ricardo Monreal Ávila, informó que, para dar continuidad a la Reforma del Poder Judicial, se realizarían ocho foros nacionales en las cabeceras de circunscripción, así como 32 más en cada uno de los estados, mismos que serán coordinados por los legisladores federales electos.
Durante su visita a la capital hidalguense, Monreal Ávila confirmó que estas actividades se llevarán a cabo durante dos meses y medio en Jalisco, Sinaloa, Veracruz, Chiapas, Puebla y tres en la Ciudad de México en la Cámara de Diputados; sin embargo, el coordinador en el Senado no precisó la fecha para efectuar dicho foro en Hidalgo.
Ayer, el presidente de Morena en Hidalgo, Marco Rico, así como legisladores electos y en funciones, señalaron el próximo jueves como fecha para todas las cabeceras distritales federales.
Ese ejercicio se llevará a cabo simultáneamente en todo el país y en Pachuca tendrá lugar en el salón Centala a las 12:00 horas.
El desconocimiento del fondo jurídico de un gran número de legisladores morenistas se suplanta con el discurso político, con los dichos del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Los “privilegios” de los ministros, de los magistrados, de los jueces.
La corrupción, la lentitud, y más lugares comunes que desnudan la ignorancia pero visten el discurso en contra del Poder Judicial.
La senadora electa, Simey Olvera, licenciada en ciencias de la comunicación y maestra en periodismo, informó que después de los foros, se realizarán “asambleas” en los 84 municipios para difundir dicha reforma, en la que podrán participar asociaciones estudiantiles y civiles.
Es decir, más política en un asunto eminentemente jurídico.
La reforma judicial propuesta por el presidente López Obrador es, esencialmente, un berrinche presidencial.
La iniciativa propone que vayan a elección los cargos de ministros de la Suprema Corte de Justicia, consejeros del Consejo de la Judicatura Federal (CJF), magistrados del Tribunal Electoral federal, magistrados de circuito y jueces de distrito.
Además, los juzgadores estatales.
La esencia de la enmienda presidencial es que el Poder Judicial Federal no se coloque por encima y desaparezca leyes aprobadas por el Congreso, que no intervenga con las reformas protestas por el Ejecutivo.
Sobre la elección por voto popular de ministros, magistrados y jueces, se plantea que en 2025 se realizará una “elección extraordinaria”, para renovar a todas y todos los ministros, jueces y magistrados del Poder Judicial.
Quienes ocupen actualmente el cargo, podrán participar en esta elección “en igualdad de condiciones”.
La actual “ministra del pueblo”, Lenia Batres, se ha cansado de demostrar su ignorancia constitucional, su nulidad profesional.
En esas manos está el futuro de la justicia en México.
**Las expresiones contenidas en estas líneas, son opinión de ellas, y por lo tanto, no representan la postura editorial de CentralMX.
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