La simulación de la “Legislatura de la Inclusión”
Un discreto, pero contundente, mensaje de reclamo del partido que arrasó en las elecciones hacia la actual Legislatura, autodenominada “de la inclusión”, de la Cámara de Diputados en Hidalgo: se acabó su simulación.
La victoria de Morena se dio de la mano de mujeres, señaló el partido, con datos en la mano.
El primer dato, aderezado con un sentido mensaje de apoyo, es que la fórmula al Senado de la República estuvo encabezada por una hidalguense de lucha: Simey Olvera Bautista.
Con ella, llegarán al Congreso de la Unión otras cinco mujeres que desde la Cámara de Diputados darán muestra de que “en Morena no se habla en vano cuando de apoyar a las mujeres se trata”, señaló el partido de forma por demás contundente.
Mirna Rubio, Viridiana Cornejo, Alma Lidia de la Vega, Tatiana Ángeles y Yamile Salomón ocuparán 5 de las 7 diputaciones federales que le corresponden a Hidalgo en la Cámara Baja.
Sin duda, alguna de ellas será la coordinadora de la bancada morenista en San Lázaro.
El mensaje es claro, no podría ser de otra manera, so pena de incurrir en una insalvable incongruencia.
En el Congreso Local, de los 18 distritos locales en disputa y en donde Morena alcanzó un triunfo arrollador, 10 de estas curules serán encabezados por mujeres comprometidas con la lucha feminista y con la conquista de más espacios de participación en igualdad de condiciones para las hidalguenses que hoy ven alcanzadas partes de sus demandas.
Por su trayectoria, experiencia y estas positivas señales que da su partido, sin duda Tania Meza deberá coordinar los esfuerzos morenistas en el Congreso local.
El mensaje es claro, no podría ser de otra manera, so pena de incurrir en una insalvable incongruencia.
El mensaje Morenista cierra de forma no solo contundente sino terminante: Lejos quedaron los discursos vacíos de la oposición en donde se trataba de engañar a la gente haciéndose pasar como supuestos aliados de las mujeres, cuando en realidad, éstas eran utilizadas como monedas de cambio y postuladas en demarcaciones en las que sabían que no tenían posibilidad de ganar.
En la “Legislatura de la Inclusión”, donde hombres, los coordinadores de los grupos legislativos, Jorge Hernández Araus, Julio Valera, Jesús Leines, Noé Hernández, Octavio Magaña y Miguel Martínez, hacían como que le daban “chance” a las mujeres de hacer como que ya era paritaria, pero acapararon los órganos de gobierno del Poder Legislativo, como la Junta de Gobierno y las comisiones decisivas.
En sus discursos en tribuna y en eventos insulsos, la patraña de ser “aliados de las mujeres” sobresalía como la vulgar demagogia que es.
Hoy, Morena afirma que se posiciona como el único partido político, a nivel nacional, en lograr que la paridad sea un resultado tangible y en donde no se dará un paso atrás en el movimiento feminista.
El mensaje, sin duda, es brutal.
Ojalá este sí sea real.
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