Por Los impresentables de Morena
Los hay en todos los estados del país, pues la facilidad con la que el partido en el poder recoge el cascajo que cae de los partidos viejos es verdaderamente pasmosa.
Los cálculos políticos de la cúpula morenista no siempre resulta como lo planean: en cualquier momento brinca un Yunes, un Haces, un Blanco, un Ochoa.
La fórmula que Morena parece aplicar ante esos bretes es el más grande y cínico de los pragmatismos.
Este fin de semana el partido que gobierna el país y el 90 por ciento de los estados impugnó ante el Instituto Nacional Electoral un comercial que Movimiento Ciudadano le restregó con ahínco y fruición en las narices: una burla a la trayectoria política de la familia de Miguel Ángel Yunes Linares.
Una burla a los deshechos de los que se vale Morena para concretar sus acuerdos políticos y luego presumirlos con pasión.
Una burla, además, a la ciudadanía, que ve como hay personajes que brincan de un partido a otro y a pesar de cualquier tropelía cometida, limpian su nombre y su honor haciendo “el 4” con la mano ante una cámara.
El propio alcalde de Pachuca, Jorge Reyes Hernández, uno de los nuevos valores de Morena, sin turbio pasado político, cuando menos, Jorge Reyes Hernández, reprochó que algunos integrantes o adherentes sólo van a “sacarse la foto, aplaudir y hacer arengas”.
O solo buscan sumarse para salvar el pellejo, como los Yunes.
A Morena le pareció calumnioso, le dio vergüenza.
Al INE, no, no hay calumnia, solo libertad de expresión.
¡Bolas!
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