Por “El Israel Félix de la actual administración”.
Por: Fernando Hidalgo Vergara @FHidalgoVergara
Con esa afirmación dura, muy dura, en el contexto político actual, acusó el diputado del PT, Edgar Hernández Dañú, al secretario de Planeación del gobierno estatal, Miguel Ángel Tello Vargas.
La comparación, per se, es una afrenta para Tello Vargas y para el discurso de la transformación, pues califica la actitud y la actuación del funcionario estatal como intolerante, prepotente y entrometida en la vida y trabajo del Poder Legislativo.
Tello Vargas logró unir a los legisladores, como dice el clásico, en su contra y lo hizo porque, con novatez y aun desconocimiento, declaró públicamente que “la era en la que los diputados locales se hacían pasar por gestores de obra pública ha concluido”.
El lenguaje particularmente agresivo de Hernández Dañú no es casualidad, resulta que las declaraciones de Miguel Tello fueron hechas en Ixmiquilpan, los dominios del legislador petista.
Hernández Dañú no es , precisamente, un modelo de legislador, en diciembre de 2021 fue acusado de abuso sexual contra una mujer, además de tratar de “sobornar” a un periodista para no publicar la información.
Por eso llama la atención la invectiva virulenta en contra del funcionario.
Sin embargo, Tello Vargas incurrió en, al menos, una imprudencia, al descalificar el trabajo de los legisladores, quienes entre sus funciones también está el de realizar gestiones en favor de la población, para lo cual, incluso, existe una partida presupuestaria en el Poder Legislativo. Una gran partida de la que hablaremos en otra entrega.
Según Hernández Dañú, el secretario Tello pretende emular a Israel Félix, el ex hombre fuerte del gobierno estatal en el sexenio de Omar Fayad y hoy alcalde de Mineral de la Reforma, pues quiere controlar todo cuanto ocurre en Hidalgo, en Morena y en el gobierno, señaló el diputado.
No es un problema menor que los diputados de distintas fuerzas políticas suban, prácticamente en bloque, a reclamar la actuación de quién es, efectivamente, el nuevo hombre fuerte del sexenio en turno.
Si Tello Vargas no quiere terminar como anteriores hombres fuertes sexenales, que al finalizar la administración de su gobernante protector pasan, con más pena que gloria, al olvido absoluto, tendrá que remediar y remendar esta andanada de reclamos en el Congreso pues, como seguramente sabe, a quien menos beneficia que sus funcionarios peleen con diputados, menos aún si son “aliados”, es al gobernador.
Si atendemos a la máxima presidencial de moda, sin la menor duda, “eso sí calienta”.
