La exjefa de gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo y varios de los funcionarios del Metro de la Ciudad de México conocían oficialmente el problema que presentaba uno de los pilotes que sostenían el tramo que se derrumbó en la Línea 12.
Así lo demuestra un oficio con fecha septiembre de 2019, cuyo reporte informaba del problema que presentaba uno de los pilotes que sostenían el tramo colapsado en la Línea 12.
Sin embargo, ni las autoridades del Metro ni de la CDMX tomaron medidas para evitar la tragedia.
Este lunes, una cuenta de Twitter denominada Metro Viral, que se dedica a denunciar situaciones irregulares en el Metro de la CDMX, hizo público un oficio girado el 17 de septiembre de 2019 por el ingeniero Concepción Ortega Vargas al ingeniero Manuel Fernando Galindo Altamirano informándole del problema, dos años antes de la tragedia.
El subgerente de instalaciones eléctricas le informa al subgerente de proyectos de la “problemática que presenta actualmente el poste 10-27 del sistema catenario flexible, que se encuentra en la interestación Olivos-Tezonco por vía 1, el cual manifiesta un movimiento anormal de manera vertical al paso de los trenes”.
En un diagnóstico preliminar, Ortega Vargas le dice a su compañero que la causa podría ser “deficiencias en su fijación con la estructura de cajón de la Línea 12”.
El oficio fue firmado de recibido por Martha Molina y pide al ingeniero “que se lleve a cabo una revisión y análisis estructural de este poste a fin de que se realicen las acciones correctivas necesarias”.