En el Senado, por el asesinato del alcalde de Uruapan
Con sombreros manchados de rojo en señal de protesta, los senadores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) realizaron este martes una manifestación en el Senado de la República para exigir justicia por el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, y denunciar lo que calificaron como una “crisis de seguridad sin precedentes” en México.
Durante una conferencia de prensa, los legisladores priistas sostuvieron que el homicidio del edil michoacano no fue un hecho aislado ni un simple “caso lamentable”, sino “un crimen de Estado”, derivado —aseguraron— de la inacción y la omisión del gobierno federal.
“Desde el Senado alzamos la voz por Carlos Manzo y por todas las víctimas de un país tomado por el crimen. No podemos normalizar la violencia ni callar ante un gobierno ausente que abandonó su deber de proteger a la gente”, expresó la senadora Anabel Ávalos Zempoalteca.
Por su parte, el coordinador del grupo parlamentario del PRI, Manuel Añorve Baños, sostuvo que “Morena hundió al país en la inseguridad” y que el asesinato del presidente municipal de Uruapan fue “una tragedia anunciada y permitida”.
“Lo dejaron solo frente al crimen; lo mató la impunidad, la omisión y la cobardía del poder. México exige autoridad, no discursos”, afirmó Añorve.
“Este es un Estado fallido”: Alejandro Moreno.

En su mensaje, el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, señaló que México vive una crisis de inseguridad brutal, con más de 300 funcionarios asesinados y 31 alcaldes ejecutados en los últimos años.
“El crimen organizado controla más del 60% del territorio. La violencia no para, la censura avanza y el gobierno de Morena sigue mintiendo, protegiendo a delincuentes y reprimiendo a quien se atreve a señalar su fracaso”, acusó.
Moreno calificó al actual régimen como “incapaz, corrupto y coludido con el crimen”, y aseguró que su partido no se quedará callado ante la impunidad ni la violencia.
“Vamos a seguir de frente, con fuerza, defendiendo al pueblo, la democracia y la libertad. México merece paz, seguridad y rumbo”, concluyó el dirigente priista.
La protesta de los senadores priistas se produce en medio de una creciente presión política hacia el gobierno federal tras el asesinato de Carlos Manzo, ocurrido el 1 de noviembre en Uruapan, Michoacán, crimen que ha provocado condenas nacionales e internacionales y que reaviva el debate sobre la estrategia de seguridad de la administración de Claudia Sheinbaum.


