Cinco personas fallecidas y 12 lesionadas; FEMDO encabeza ahora la indagatoria por delincuencia organizada.
La Fiscalía General de la República (FGR) confirmó que la investigación sobre la explosión de un automóvil ocurrida el 6 de diciembre en Coahuayana, Michoacán, se desarrolla ahora bajo la línea de delincuencia organizada, en coordinación con el Gabinete de Seguridad del Gobierno de México y autoridades estatales. La dependencia informó que las diligencias continúan en el sitio del siniestro con un despliegue especializado de la Agencia de Investigación Criminal (AIC).
En el área trabajan 15 peritos del Centro Federal Pericial Forense (CFPF) y 11 policías federales ministeriales, expertos en criminalística de campo, fotografía, medicina forense, genética, lofoscopia, telecomunicaciones, tránsito terrestre, ingeniería y arquitectura, incendios y explosivos, química y balística.
La FGR confirmó que cinco personas perdieron la vida y 12 más resultaron lesionadas por la explosión. La indagatoria está a cargo de la Fiscalía Especializada en materia de Delincuencia Organizada (FEMDO), en coordinación permanente con la Secretaría de la Defensa Nacional, Secretaría de Marina, Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y la Guardia Nacional.
Versión previa de la FGR
El pasado 6 de diciembre, la propia FGR había informado que el hecho constituía un atentado con artefactos explosivos frente a las instalaciones de la Policía Comunitaria de Coahuayana, y que la investigación se realizaba por el delito de terrorismo. Aquella versión señalaba que participaban la Fiscalía Especializada de Control Regional (FECOR), la FEMDO y la Unidad Especializada en Investigación de Terrorismo, Acopio y Tráfico de Armas (UEITATA).
Los hechos, según ese primer comunicado, ocurrieron en la colonia Centro del municipio, cuando elementos de la Policía Comunitaria fueron blanco de un ataque con explosivos.
La Fiscalía no detalló por qué motivo se modificó la línea de investigación, pero confirmó que la FEMDO asumió el caso bajo la figura de delincuencia organizada, manteniendo la coordinación con las instancias federales de seguridad.


