Por Cristhian Guadarrama Martínez
En un esfuerzo por abordar las inequidades en la compensación de artistas y la promoción desigual dentro de la industria de la música en streaming, el Parlamento Europeo ha adoptado una resolución instando a cambios significativos.
La iniciativa busca asegurar que los artistas más pequeños reciban una compensación justa en comparación con los sellos discográficos líderes y artistas populares.
El miércoles, los miembros del Parlamento Europeo emitieron una resolución destacando la falta de regulación de la Unión Europea sobre los servicios de transmisión de música, a pesar de ser la forma de consumo auditivo más popular en la actualidad.
La resolución apunta a garantizar pagos justos y promoción adecuada para los artistas, reconociendo la necesidad de abordar problemas como las regalías inadecuadas y los algoritmos de recomendación.
La propuesta busca evitar que las obras musicales europeas sean opacadas por la vasta cantidad de contenido en plataformas como Spotify.
Los eurodiputados abogan por revisar las obsoletas tasas de regalías “predigitales”, que a menudo resultan en compensaciones mínimas para los artistas a cambio de mayor exposición.
Además, se contempla imponer cuotas a las obras musicales europeas para respaldar a los artistas de la UE.
La resolución también exige transparencia en el uso de inteligencia artificial (IA) por parte de las empresas de streaming.
Se insta a revelar si se ha utilizado IA en la creación de pistas y a abordar la preocupación sobre la música “deepfake”, que imita a artistas sin su consentimiento. La transparencia en los algoritmos de recomendación también es esencial para evitar sesgos a favor de sellos discográficos y artistas prominentes.
Ibán García del Blanco, ponente de la resolución, destaca que el Parlamento Europeo da voz a las inquietudes de los creadores europeos, quienes son fundamentales en el mercado de música en streaming. La diversidad cultural y la justa compensación a los autores son prioridades clave.
Aunque la resolución no tiene carácter legislativo, representa un llamado a la Comisión Europea para que reconozca las preocupaciones y promulgue legislación para mejorar la situación, un proceso que podría llevar varios años.
La iniciativa destaca el compromiso de la UE con la equidad y el reconocimiento justo de los artistas, buscando moldear un panorama de streaming musical más justo y equitativo.
