Suponiendo…sin conceder 

Suponiendo…sin conceder 

La pantomima, patraña, del Congreso hacia los pueblos indígenas 

Por: Fernando Hidalgo Vergara

Es difícil encontrar un término que defina algo que vaya más allá de lo grotesco, no perderemos tiempo en eso. 

Ayer lunes, en la sede del Poder Legislativo de la entidad, en la Ciudad capital por supuesto, no en alguna lejana comunidad, fue realizado el llamado “Encuentro de Pueblos Originarios del Estado de Hidalgo”.

Este encuentro fue para crear propuestas de iniciativas de Ley que favorezcan a las comunidades indígenas.

Las propuestas de iniciativa de Ley Indígena contemplan: Ley del Maguey y el Nopal; de formación deportiva; para la profesionalización del deporte indígena y para la incorporación de una formación de lengua indígena.

Presentes, por supuesto, diputadas, diputados, funcionarios, la clase alta  de los gobiernos o representantes indígenas, como se asumen a sí mismos. 

Música ambiental prehispánica, el bastón de mando, las palabras de conmiseración hacia los indígenas. 

El diputado Fortunato González Islas, presidente de la directiva de este mes de mayo en el legislativo, encabezó el acto, por llamarle de algún modo. 

Una pantomima, una verdadera patraña escénica cuyo fin único es su lucimiento personal y el de algunos otros personajes que le acompañaron.

Para la verdadera representación indígena, la que está en sus comunidades en la brega cotidiana, nada. 

González Islas, en el colmo de lo estrambótico, tuvo la osadía de hacerse llamar “jefe supremo indígena de la zona náhuatl de Huejutla de Reyes”.

El mismo diputado que la semana pasada violó flagrantemente la ley orgánica del Poder Legislativo al no convocar a las sesiones mínimas que exige el ordenamiento que rige su trabajo como legislador, ayer, arengaba como en un vulgar mitin político de los años setenta, gritando desaforado vivas y loas, zalameras, lambisconería ad náuseam al presidente de la República y al gobernador del estado. 

No hay fin alguno más que su lucimiento político y la oportunidad de buscar el foco mediático con la frivolidad del evento citadino, en la comodidad de la capital estatal. 

De la Consulta indígena que le costó al Congreso del estado cerca de 10 millones de pesos y cuyo producto final, las reformas y adecuaciones no se han cumplido. 

 Aún no se presentan iniciativas para modificar el marco normativo, pese a que ya pasaron siete meses de la conclusión de la consulta. 

La Consulta a Pueblos y Comunidades Originarias y Afromexicana tiene por objeto armonizar disposiciones de la constitución local con la federal, además de adicionar y reformar diversas disposiciones del Código Electoral del Estado de Hidalgo, de la Ley de Participación Ciudadana del Estado de Hidalgo y de la Ley Orgánica Municipal, en materia de derechos político-electorales de pueblos, comunidades y personas originarias.

Así lo ordenó la Suprema Corte de Justicia de la Nación, nada más y nada menos. 

Pero eso no requiere cámaras, discursos ni maestro de ceremonias, puede esperar.

administrator

Noticias Relacionadas

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *