Por 🧙🏻♀️ Multan a Actopan por queja de síndico morenista
🧙🏻♀️ No hay Legislatura de la inclusión, diputadas.
🧙🏻♀️ Peregrinos arriesgan la vida
🧙🏻♀️ Multan a Actopan por queja de síndico morenista
Bien dicen que cuando la perra es brava, hasta a los de casa muerde.
Y así, tradicionalmente, ha ocurrido en todos y cada uno de los partidos pertenecientes a la fauna política mexicana.
Así sucumbió el PRD, así está a punto de morir el PRI y así caerá también Morena, que no deja de tener “guerras intestinas” cuando de conseguir el mejor hueso se trata.
Alejandro Chapey Ramírez, síndico hacendario de Actopan, presentó la inconformidad por la cual el municipio de Actopan, gobernado por la exdiputada Tatiana Ángeles, fue multado por la Auditoría Superior del Estado.
A Chapey, con genes priistas asentados ya en Morena -¿dónde más?- no le importó que Ángeles Moreno, a quien agarraron paseando fuera del país, sea de su mismo “movimiento”.
🧙🏻♀️ No hay Legislatura de la inclusión, diputadas.
Brutal golpe de realidad el que dieron las diputadas Lisset Marcelino Tovar y Sharon Macotela Cisneros, quienes, por separado, han reprochado la simulación de la autonombrada “Legislatura de la inclusión”, pues no solo no existe tal, sino que ha menguado el poder de las mujeres, pese a ser el mismo número de diputados hombres.
El reproche concierne a que, durante prácticamente toda la legislatura, la Junta de Gobierno del Congreso local se confirmó únicamente por hombres.
Además, las comisiones legislativas más importantes fueron acaparadas por hombres.
Por si fuera poco, los eventos relativos a los derechos de las mujeres fueron encabezados ¡por hombres!
Y ya, en el colmo de la simulación, es la primera vez que un hombre preside la Comisión de Género del congreso.
Elogio en boca propia es vituperio, deberían saber los diputados.
🧙🏻♀️ Peregrinos arriesgan la vida
Como cada año en las peregrinaciones por el día de la virgen de Guadalupe, en las calles de Pachuca y zonas circunvecinas se dan las peregrinaciones que se dirigen a la basílica menor de la Villita, en la ciudad de Pachuca.
Y para variar, los peregrinos arriesgan la vida a la circular de forma por demás imprudente, sobre acotamientos, en sentido contrario, sin respetar semáforos (los que aún funcionan).
Ni Dios nuestro señor, ni la santísima virgen de Guadalupe estarán de acuerdo en que la gente que acude a saludarles en tan tradicional fecha arriesgue su vida de forma tan innecesaria y temeraria.
