Por 🧙🏻♀️ El secretario de Seguridad Pública desmintió ¡al gobernador!
🧙🏻♀️ La vocera grosera.
🧙🏻♀️ Tu nombre sacrosanto: Colegio Militar.
🧙🏻♀️ El secretario de Seguridad Pública desmintió ¡al gobernador!
Pero también al General Alfredo Salgado Vargas, nuevo comandante de la 18 ° Zona Militar enclavada en Hidalgo.
En un alarde de hombre “bragao” Salvador Cruz Neri le retobó al General de Brigada diplomado de Estado Mayor al desmentirlo cuando aseguró que en Hidalgo opera el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Cruz Neri apeló al ya clásico de clásicos de la cuatroté al decir que “tienen otros datos” en los que desde luego Hidalgo está libre de la presencia de esa organización criminal.
Lo malo para el funcionario estatal es que además de desmentir al militar, también lo hizo con su jefe directo, el gobernador Julio Menchaca, quien en una entrevista aceptó no solo la presencia del grupo delictivo, sino que lo van a combatir con todo el poder del Estado.
A ver, quién tiene los otros datos entonces.
🧙🏻♀️ La vocera grosera.
Así se portó la directora general de comunicación social de la Universidad Autónoma del estado de Hidalgo, Citlali Anahí Monzalvo López, con las y los reporteros que cubrieron la fallida mesa de diálogo con el rector Octavio Castillo.
Qué bonitos modos tan feos los de la funcionaria universitaria, quien impidió a los medios preguntarle al rector la razón por la cual no le dio la gana emitir una disculpa pública al alumnado por las agresiones hacia ellos ocurridas el 19 de septiembre.
Con la prepotente autoridad de su cargo, exigió a los reporteros salir en orden del auditorio en el que se encontraban, además de repetir en varias ocasiones que estaban en un “receso permanente” por lo que el rector no respondería pregunta alguna.
Al final, en la calle, el rector tuvo que hablar, sin decir, nuevamente, absolutamente nada.
🧙🏻♀️ Tu nombre sacrosanto: Colegio Militar.
Vibró el clarín de la guerra; resonaron las fanfarrias;
redoblaron los tambores en una marcha triunfal,
y llevaron de la patria a todos los confines,
su nombre sacrosanto: Colegio Militar.
Así, con la sangre hirviendo y la piel enchinada, se develaron en el Congreso del estado las letras “de oro” en el Muro de Honor con motivo del bicentenario de la institución marcial, cuna de grandes héroes en la historia nacional, como el General Felipe Ángeles, ilustre hidalguense.
La solemnidad disciplinaria de los castrenses contrastó, como siempre, con la chunga de la pasarela de candidaturas que se vio en el Pleno del Congreso hidalguense.
Fotos y sonrisas en las redes sociales, abrazos, saludos, pulgares arriba y claro, el saludo de la cuatroté, amenizaron el acto solemne en el que no faltó el gesto adusto y reprobatorio de algunos mandos militares.
Y con toda la razón del mundo.
La patria bate marcha de honor a tu pasado,
de epopeyas gloriosas y de nombre inmortal.
Emilio I. Aguilar y José Ignacio Ríos del Río deben haber mascullado improperios desde donde se encuentren.
