Animales crepusculares que brindan equilibrio a los ecosistemas
En el reino animal, los depredadores nocturnos juegan un papel clave en el equilibrio de los ecosistemas. Entre ellos destacan los búhos, aves de caza silenciosa que, con sus potentes garras y aguda visión, capturan a sus presas en la oscuridad. Más allá de su instinto cazador, los búhos también han sido símbolo de sabiduría a lo largo de la historia.
La bióloga y divulgadora ambiental de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Alejandra Alvarado, explicó que muchas veces los búhos salen al anochecer y permanecen activos hasta el amanecer. Por eso se les considera animales crepusculares, lo que les permite ser cazadores nocturnos muy eficaces que, además, brindan importantes servicios ecosistémicos.
A diferencia de las lechuzas, los búhos tienen los ojos de color amarillo o anaranjado, mientras que las lechuzas tienen ojos más pequeños y de color almendrado. Ambos tienen una visión binocular, similar a la humana, esto les otorga gran precisión para localizar a sus presas durante la noche
Su dieta es completamente carnívora e incluye ratones, ratas, ardillas, tusas, crías de conejo, liebres, musarañas, murciélagos y otras aves como gorriones. También consumen reptiles —serpientes y lagartijas—, anfibios como ranas y sapos, e insectos como escarabajos y grillos.
