No se autorizarán recursos adicionales en el presente ejercicio, ni en los subsecuentes.
Alberto Skewes
A cuatro días de finalizar el sexenio de Andrés Manuel López Obrador y con cinco años de retraso, el Diario Oficial de la Federación publicó el decreto que declara zona de restauración ecológica el área de influencia de la presa Endhó, en Hidalgo.
El documento establece como zona de restauración ecológica el área de influencia de la presa Endhó, con una superficie total de 36,637-93-00 hectáreas, ubicada en los municipios de Atitalaquia, Atotonilco de Tula, Tepeji del Río de Ocampo, Tepetitlán, Tezontepec de Aldama, Tlahuelilpan, Tlaxcoapan y Tula de Allende, en el estado de Hidalgo.
El decreto tiene por objeto, señala el DOF, “llevar a cabo las acciones necesarias para regenerar, recuperar y restablecer las condiciones que propicien la evolución y continuidad de los procesos naturales que en ella se desarrollaban, particularmente en lo referente al equilibrio ecológico y los servicios ecosistémicos de aprovisionamiento de agua, aire, suelo y biota”.
En la zona de restauración ecológica de la presa Endhó la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, por conducto de sus unidades administrativas, de sus órganos desconcentrados, así como las entidades paraestatales sectorizadas a esta, y demás dependencias y entidades involucradas, deberán realizar diversas acciones encaminadas a regenerar, recuperar o restablecer las condiciones naturales de dicha zona.
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, debe supervisar que las actividades que se realicen dentro de la zona de restauración garanticen la sustentabilidad de las mismas.
Dicha supervisión, la debe llevar a cabo por conducto de sus unidades administrativas, órganos desconcentrados y organismos descentralizados sectorizados competentes, en coordinación con las demás dependencias de la Administración Pública Federal competentes y con la participación del gobierno del estado de Hidalgo.
La Semarnat debe formular y expedir el programa de restauración ecológica a que se refiere el presente decreto dentro de un plazo máximo de ocho meses, a partir de su entrada en vigor.
El programa de restauración ecológica y los proyectos de restauración de la zona deben concluir en un plazo máximo de 12 años, contados a partir de su emisión.
El decreto establece que las erogaciones que se generen con motivo de su entrada en vigor, se deben cubrir mediante “movimientos compensados”, conforme a las disposiciones jurídicas aplicables, con cargo al presupuesto aprobado para los ejecutores de gasto correspondientes en el presente ejercicio fiscal, y “no se autorizarán recursos adicionales en el presente ejercicio ni en los subsecuentes”.
Cinco años de retraso
Desde 2019, la Secretaría de Medio Ambiente Federal, emitió la declaratoria de Emergencia Ambiental para la región de Tula por la contaminación del aire, agua y suelo que ha vuelto a la zona inhabitable, sin embargo, nada se ha concretado hasta ahora.
El 16 de julio de 2019, el exsecretario del Medio Ambiente federal, Víctor Manuel Toledo Manzur, anunció que para la zona Tula – Tepeji hacía falta la emisión de una declaratoria de emergencia ambiental, que derivaría en su restauración ecológica.
El 20 de febrero de este año, Julio Menchaca Salazar, gobernador de Hidalgo, reconoció que está pendiente no sólo la firma del documento para la Declaratoria de Restauración Ecológica, también el anuncio de la inversión para revertir el daño medioambiental grave.