Se trata de “propaganda disimulada, disfrazada de obra pública”.
El Partido Verde Ecologista de México presentó una reforma para considerar “falta administrativa grave” utilizar como imagen institucional de los bienes muebles e inmuebles destinados al servicio público, colores, símbolos, signos o frases que, directa o indirectamente, puedan vincularse o identificarse con algún partido político.
La iniciativa ya se encuentra en la Comisión de Transparencia y Anticorrupción para su dictamen y pase al pleno de la Cámara de Diputados.
La propuesta reforma la Ley General de Responsabilidades Administrativas, para actualizar el marco jurídico en materia de regulación del uso de colores partidistas en bienes e instalaciones públicas.
Expone que “históricamente, en la vida partidista se ha abusado del uso de los colores propios de los partidos políticos en el poder, en las instalaciones y bienes destinados al servicio público, sin importar el orden de gobierno, situación que es grave porque en el trasfondo se encuentra un velado acto propartidista equiparable a un acto de campaña en tiempos electorales”.
Señala también que “es evidente que se violentan los principios constitucionales de equidad e imparcialidad en las contiendas electorales, así como el buen despacho en el ejercicio de los recursos públicos que tienen bajo su gestión”.
Observa que se trata de “propaganda disimulada, disfrazada de obra pública u obligación institucional”.
“El servicio público, por su naturaleza misma, debe ser realizado desde la más pulcra imparcialidad, siendo los pilares del quehacer estatal, la objetividad, el ejercicio eficaz de los recursos públicos y el derecho a la buena administración”.
Considera que siempre que se trate de comunicación propagandística partidista (sic), “deberá hacerse de manera institucional y sin tintes partidistas o electorales”.