Atilano “R.P.”, un año, siniestra apuesta al olvido
El 10 de enero de 2024, hace un año y tres días, un juez de control del tribunal superior de justicia de Hidalgo, vinculó a proceso al exsecretario de Educación Pública del estado, Atilano “R.P.”, por el delito de peculado, por la friolera de 144 millones de pesos.
Y continúa libre, sin rastro de él, desde entonces. La autoridad responsable no ha sido capaz de localizar al hombre, con todo y que, supuestamente, cuenta con una “Ficha Roja”, de la Organización Internacional de Policía Criminal, conocida como Interpol.
El extitular de la Secretaría de Educación Pública, sí, en el sexenio del hoy embajador Omar Fayad Meneses, fue vinculado a proceso “en ausencia”, por el millonario desvío de recursos públicos.
La denominada Unidad Especial para la Investigación del Maxiproceso de la Estafa Siniestra, perteneciente a la Procuraduría de Justicia estatal, consiguió vinculación a proceso del superior jerárquico de Pablo “MC”, quien lleva un año y nueve meses preso.
Los hechos imputados al extitular de la SEPH, ocurrieron a partir de que el 25 de marzo de 2022, solicitó a la Secretaría de Finanzas Públicas de Gobierno del Estado de Hidalgo, cuya cabeza era Jessica Blancas, 144 millones de pesos, bajo el argumento de subsanar el restablecimiento de los servidores, sistemas y centros de datos instalados en diversas máquinas virtuales así como la recuperación de más de cinco millones de registros digitales, esto debido a que habían sufrido un supuesto hackeo.
Los recursos solicitados fueron autorizados por la Secretaría de Finanzas, cuya máxima autoridad para consentir la salida de dinero era, si, Jessica Blancas, y transferidos el 30 de marzo de 2022, a una cuenta bancaria a nombre del Instituto Hidalguense de Educación y posteriormente fueron transferidos para beneficiar a la persona moral AKTAION DIGITAL S.A. DE C.V., empresa que había sido contratada para restablecer los servicios informáticos.
Atilano “RP”, fue vinculado a proceso y no le fueron impuestas medidas cautelares por parte de la autoridad judicial, pues estaba amparado, por la justicia federal, y quizá alguna otra, no precisamente jurídica.
Pablo “MC” es investigado, y fue encarcelado, por hechos que la ley sanciona como peculado por 140 millones de pesos, es decir, el mismo delito.
Ese amparo que protegió al exsecretario, fue una ventaja competitiva que no tuvo el exsubsecretario, quien, pareciera ser, sólo aparentemente, que ni siquiera sabía que lo estaban investigando, mucho menos que lo iban a detener.
Pablo “MC” y Atilano “RP”, justicia a secas, justicia y gracia.
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