Por Asael y Rafael: “Cañonazos” transparentados, en el Congreso
Aquella célebre frase, acuñada por “El manco de Celaya”, “El General invencible”, Álvaro Obregón Salido, que reza: “Nadie aguanta un cañonazo de 50 mil pesos”, adquiere otro matiz y sobre todo, otras cantidades en la actualidad.
Porque hoy 50 mil pesos, en las cloacas de la política, podrían resultar incluso un insulto gravoso.
Pero uno de un millón 700 mil pesos, es ya mucho más “decente”, aceptable.
Un día antes de finalizar su periodo constitucional, la 64 Legislatura del Congreso del Estado de Hidalgo gastó 20 millones 500 mil pesos en la entrega de “bonos” de fin de legislatura, de acuerdo con una investigación de la periodista Verónica Ángeles, directora de la Revista Plétora Lex, especializada en temas jurídicos y legislativos.
La investigación, con base en la Plataforma Nacional de Transparencia, reveló que el entonces presidente de la Junta de Gobierno, el diputado panista Asael Hernández Cerón, se otorgó un “bono de salida” en la Legislatura número 64 del Congreso del estado de Hidalgo.
En cheques chiquitos, para cobrar poquito, se repartió un millón 700 mil pesos en fragmentos de 200 mil y 500 mil pesos.
Caso similar, su compañero de Morena, Rafael Garnica Alonso, quien se destinó la misma cantidad.
A Marcelino Carbajal Oliver, coordinador del Grupo Legislativo de Nueva Alianza, se le entregó un cheque por la cifra de 800 mil pesos; al del Partido del Trabajo, Miguel Ángel Peña Flores se le entregó un cheque también por 800 mil pesos.
La coordinadora del PRI, María Luisa Pérez Perusquía se le entregó un cheque por un millón de pesos, mismo que le devolvió al Congreso al iniciar la siguiente legislatura, cuando ya era presidente el aún diputado Francisco (Xavier) Berganza Escorza.
El diputado Berganza Escorza, desnudó sus parámetros de sinceridad, le dijo a la periodista autora de la investigación que “le extrañó” la acción de Pérez Perusquía, al punto de “sugerirle” cobrar su cheque, al fin que ya era un ejercicio finalizado.
No tuvo éxito, recibió el documento de la exdiputada y lo devolvió a las arcas públicas.
La que quedó fuera de esta distribución de recursos adicionales fue Jajaira Aceves Calva, entonces coordinadora del Partido Encuentro Social Hidalgo (PESH), a quien aparentemente excluyeron de esa repartición “extraordinaria”.
Finalmente, el reportaje señala que Osiris Leines, presidente de la Junta de Gobierno actualmente, dijo tajantemente que no se solicitarán recursos extraordinarios al Gobierno del Estado para la entrega de bonos a los diputados y diputadas locales y tampoco es un recurso que esté contemplado dentro del presupuesto 2024.
Sobre el muerto las coronas, dice la conseja popular: si acaso hay la petición, como la que, en una lógica inferencia, atendió el gobierno de Omar Fayad a través de Jessica Blancas, para “cañonear” a diputados que en ese entonces eran de oposición, sin duda se sabrá.
Y se publicará.
El gobierno actual no tiene margen para prestarse a esas componendas dignas de políticos de la pos revolución.
Nos vemos el próximo lunes, inmerecidamente.
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