Suponiendo…sin conceder

Suponiendo…sin conceder

Menchaca, Delgado, Amieva y el amasijo  morenista 

Por: Fernando Hidalgo Vergara @FHidalgoVergara

Morena es un amasijo de contradicciones.

Mientras el gobernador Julio Menchaca acudía a la implementación de un  precepto de alto nivel jurídico que, junto con  Ricardo Monreal Ávila,presentó cuando era senador, para expedir el Código Nacional de Procedimientos Civiles y Familiares, otros integrantes de su partido muestran su desprecio por la ley. 

Mario Delgado, presidente nacional morenista, acude a chicanadas para burlar lo establecido en la ley.

Con cachaza, aseguró que no burlan la ley al elegir a su “coordinador de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación”, es decir, su candidato, o candidata.

Así, con estoica circunspección, negó que el proceso que se realiza con las cuatro (más tres colados) “corcholatas” sea para elegir a su candidatura presidencial, pues es una “actividad interna” para seleccionar al que llamó como coordinador de la Defensa de la Cuarta Transformación.

El problema mayor no es violar la ley, eso, ya se demostró, no conllevará consecuencia alguna, el verdadero problema consiste en que, por alguna razón, Delgado Carrillo cree que la gente, el pueblo, es estúpido y se traga semejante patraña.

El caso más dramático es, sin embargo, el del aún alcalde de Mixquiahuala, José Ramón Amieva, quien ya anunció que pedirá licencia para irse a la campaña…perdón, a defender la transformación, con Claudia Sheinbaum, por supuesto. 

Lo de menos es que bote el municipio que ganó a más de un año de arribar con el voto popular, eso el pueblo mixquiahualense sin duda lo comprenderá. 

Lo que llama la atención es que, en su etapa como alcalde sustituto en la Ciudad de México, en la última administración perredista, fue calificado siempre como traidor por sus entonces correligionarios.

Los integrantes del círculo cercano del entonces jefe de gobierno saliente, Miguel Ángel Mancera, siempre dijeron, consignado en entrevistas y declaraciones públicas de aquel proceso electoral, que Amieva Gálvez los había “vendido” al operar para la victoria morenista, encabezada por la propia Sheinbaum Pardo.

Nada que un chapulín saltimbanqui promedio no haya manejado. 

Asi con las contradicciones políticas e ideológicas que se juntan en el partido en el poder.

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