Durante el gobierno de AMLO, aumentó la deforestación en casi 3 mil hectáreas
Este 22 de abril se celebra el Día de la Madre Tierra, una fecha marcada en los calendarios por las Naciones Unidas con el objetivo de concienciar a la humanidad sobre los problemas de la “superpoblación”, la contaminación y la importancia de la conservación de la biodiversidad.
Además, de acuerdo con el Programa ONU Medio Ambiente, durante esta jornada, se alienta a todas las entidades en el plano nacional e internacional a convocar y organizar actividades relacionadas con el cuidado y mantenimiento de la naturaleza.
El cambio climático, las afectaciones provocadas por la intervención humana en la naturaleza, así como los crímenes que perturban la biodiversidad, como la deforestación, el cambio de uso del suelo, la producción agrícola y ganadera intensiva o el creciente comercio ilegal de vida silvestre, pueden acelerar el ritmo de destrucción del planeta.
Este día de la Madre Tierra es el segundo que se celebra dentro del Decenio de la ONU para la Restauración de Ecosistemas.
Existen diversas opciones viables y eficaces para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adaptarse al cambio climático provocado por el ser humano, las cuales están disponibles en la actualidad, según afirmaron los científicos en el último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), publicado en marzo de este año.
“La incorporación de una acción climática eficaz y equitativa no solo reducirá las pérdidas y los daños para la naturaleza y las personas, sino que también aportará mayores beneficios”, aseveró Hoesung Lee, Presidente del IPCC.
“En el Informe de síntesis, se destaca que urge tomar medidas más ambiciosas y se demuestra que, si actuamos ahora, aún es posible garantizar un futuro sostenible y habitable para todos”.
En 2018, el IPCC puso de relieve la escala sin precedentes del desafío que suponía limitar el calentamiento a 1,5 °C.
Cinco años después, el desafío es aún mayor debido al aumento constante de las emisiones de gases de efecto invernadero.
El ritmo y la escala de las medidas adoptadas hasta el momento, así como de los planes actuales, son insuficientes para hacer frente al cambio climático.
La quema de combustibles fósiles y el uso desigual e insostenible de la energía y las tierras durante más de un siglo han provocado un calentamiento global de 1,1 °C por encima de los niveles preindustriales.
Como resultado, se han producido fenómenos meteorológicos extremos más frecuentes y más intensos que han generado impactos cada vez más peligrosos en la naturaleza y las personas en todas las regiones del mundo.
Cada aumento del calentamiento se traduce en peligros que se agravan rápidamente.
Las olas de calor de mayor intensidad, las lluvias más fuertes y otros fenómenos meteorológicos extremos exacerban los riesgos para la salud humana y los ecosistemas.
En todas las regiones, el calor extremo está causando la muerte de personas.
Se prevé que la inseguridad alimentaria y la inseguridad hídrica asociadas al clima se incrementarán debido al aumento del calentamiento.
Cuando los riesgos se combinan con otros fenómenos adversos, como las pandemias o los conflictos, resulta aún más difícil controlarlos.
Reforma a la industria eléctrica, peligro ambiental
Un grupo de organizaciones civiles, encabezadas por Greenpeace y el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), advirtieron este lunes de las graves consecuencias para el medio ambiente y para la salud de los mexicanos que provocaría la reforma a la industria eléctrica que propuso el presidente Andrés Manuel López Obrador.
La iniciativa que reforma y adiciona diversas disposiciones de la Ley de la Industria Eléctrica (LIE), presentada a la Cámara de Diputados por el mandatario mexicano a principios de febrero en carácter de preferente, “atenta contra la calidad de vida de generaciones presentes y futuras”, señalaron en un comunicado.
Esto, argumentaron, porque fomenta “un modelo eléctrico cuya implementación favorece mayores emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y contaminantes climáticos de vida corta (CCVC), cuyos impactos en la salud y en el ambiente han sido científicamente comprobados”.
Tren Maya, ecocidio
Un estudio del Observatorio de Deforestación Neta Cero, señaló que la construcción y entrada en operación del proyecto implicará un aumento en la deforestación de 9,786 hectáreas por año a 12,189.2 ha/año entre el 2018 y el 2030.
El estudio, divulgado por la organización en diciembre de 2022, explica que con la construcción y entrada de operación del Tren Maya, la tendencia de deforestación neta en la región de influencia del proyecto aumentará de 9,786 hectáreas por año (ha/año) a 12,189.2 ha/año entre el 2018 y el 2030, lo que significa un incremento de 2,403.1 ha/año con respecto a la proyección tendencial sin el proyecto.
Reducción al presupuesto para protección del medio Ambiente
El director jurídico de la organización Greenpeace, Luis Miguel Cano, explicó que la reducción del presupuesto en materia ambiental refleja la falta de interés del gobierno de Andrés Manuel López Obrador en el tema.
Advirtió que la actual crisis ambiental que vive el país es una violación a los derechos humanos, por lo que esa agrupación interpuso un juicio de amparo contra esa disminución de recursos públicos.
En entrevista con la periodista Carmen Aristegui, el abogado ambientalista señaló que el presidente López Obrador redujo presupuesto contra cambio climático de 61 a 39 mil millones de pesos.
Presupuesto para Medio Ambiente aumenta en Hidalgo
De acuerdo con el Periódico Oficial del estado de Hidalgo, en el Presupuesto de Egresos del Estado de Hidalgo para el Ejercicio Fiscal 2023, la secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales aumentó en 15 millones 446 mil 607 pesos con respecto al ejercicio anterior.
Te puede interesar:
En Hidalgo, el medio ambiente, en manos de…una experta en derecho electoral